Mi mundo.

Cuando ves como es realmente la vida, te creas un mundo interior en el que nadie puede profanarlo.
El mío es tan particular como cualquiera, la única diferencia es que es mío.
Ese momento en el que me ves con la mirada fija en el vacío, cuando escucho música y dibujo, cuando estoy en mi cuarto con la puerta cerrada, cuando leo, en ese momento estoy en mi mundo. Un mundo en el puedo ser yo misma, en el que no me tengo que preocupar por lo que digo por sí, por culpa de mi sinceridad, molesto a alguien. En el que invento mis propias historias sin que alguien me diga que son absurdas. Donde canto bien. Cuando me adentro en mi mundo soy capaz de viajar a los lugares más insospechados y fascinantes existentes.
El mundo en el cual me enfrento a mis enemigos y salgo victoriosa. Ese mundo en el que nada ni nadie entrará. Porque es mi rincón. Es mi locura. El único lugar en el que sé que no me harán daño.
Si intentas entrar sólo te encontrarás un cartel en el que diga;

 "Que te den. No interrumpas."