Otro día más salgo de mi casa con el relente de la mañana dándome en el cuello. Ania me espera en el parque, como siempre, para irnos juntas a la parada del autobús del instituto. Hoy tiene la cabeza gacha, la voz ronca de haber llorado. Deduzco que tuvo una pelea con sus padres. Al preguntarle por el suceso me responde:
- Soy la decepción de mi familia. Todos son médicos, enfermeros o matemáticos y tienen carreras y títulos universitarios. Y yo ni siquiera soy capaz de sacar 2º de bachiller.
- Sé que puedes. A todos nos está costando trabajo. Lo único que pasa es que somos vagos, pero, ¿quién no lo es a esta edad? ¡No te rayes! – La intenté consolar.
Cuando llevamos un largo rato en el autobús, Ania me dijo convencida que se quería ir de su casa. Que estaba harta. Cogería todos sus ahorros, se iría y nadie sabría donde estaría.
Miente. Nunca lo ha hecho y nunca lo hará. Llevo 10 años de mi vida escuchándola decir eso y nunca lo hace.
Pasa el día relativamente normal, quitando el examen de geografía que no pasará del cinco y las actividades de filosofía que se me han olvidado en casa y, por tanto, tengo un cero en actividades.
No he visto a Ania en todo el día a excepción de la vuelta a casa en autobús. Se la ve más relajada. Evito preguntarle como ha pasado el día. No quiero recordárselo. Enganché los auriculares a mis orejas para evadirme del mundo.
Pasa la semana, como otra cualquiera. Suspensos, aprobado por los pelos, chuletas, clases particulares, etc.
A Ania se le ve mejor. Vuelve a los “Buenos días” con su sonrisa de oreja a oreja. Todo es monótono hasta que llega el fin de semana. Esos días que todo el mundo ansía. Ese barco a la libertad que todos necesitamos. Y cuanto más tarda en llegar más pronto se va.
Es domingo, ocho de la tarde. Llaman al teléfono. Es la madre de Ania. Lleva todo el fin de semana fuera de casa con una amiga y según está se fue ayer por la mañana de su casa. No coge el teléfono y su hucha, con forma de casita de chocolate, está vacía.
Me deshago del pijama y me pongo los primeros vaqueros y sudadera que veo, con angustia. Lo hizo. Fue capaz. Me pongo en marcha y voy al único sitio que sé con certeza que está.
Supongo que dentro de mí sabía que esto ocurriría tarde o temprano. Pero era tan poco probable. Y no paraba de culparme mientras iba hacia allá. Debería haber hablado con ella ese día en el autobús y disuadirla.
La veo desde la lejanía, tumbada boca abajo cual trapo. Se me nubla la vista por la lágrimas. ¡MIERDA! ¡MIERDA! ¡MIERDA! Me tiro junto a ella. Su maleta y una botella de vodka vacía, están a su lado. Mi mente está en shock, en blanco.
Se mueve. Está viva. La abrazó y le digo:
- Gilipollas
Me mira con los ojos llorosos, y sonriente me responde:
- Gracias
Uau, muy buena! Está basada en hechos reales? =O
ResponderEliminarMas o menos, hasta donde se escapa es cierto, desde ahí hasta el final mi imaginación vuela
ResponderEliminarPero no entiendo su motivación para irse ._. para nada
ResponderEliminarTodo adolescente alguna vez en tu su vida a querido irse de su casa. Ania está tan harta de decirlo y no hacerlo que un día se lo propuso. Tenia los "suficientes" ahorros para poder irse y al menos darle a los padres un susto.
EliminarEsto es lo que pasaría si algunos nos hubiéramos escapado. Nuestra mejor amiga nos hubiera buscado, lo único que Ania tuvo suerte y no le ocurrió nada.
Condená... no me has conseguido arrancar ninguna lágrima (porque suelo ser demasiado frío y me cuesta bastante) pero eso no significa que no me haya llegado, ni mucho menos, de echo casi lo consigues xD Además la musiquita que tienes en el blog ayuda bastante a la emotividad :P
ResponderEliminarMi más sincera enhorabuena por tus textos que son geniales, así que sigue adelante ;) Un besillo!!
Moli.
Moli! eres pachenco y por poco te hago llorar. ¡DIOS! me siento taaaan importante! xd Gracias por visitarme y leerme^^
EliminarEspero que los proximos te enganchen, y te aseguro que alguno, ALGUNO te hará llorar
Es Paechenco, con la "e" de Páez ¬___¬ :P y eso ya se vera... quizás, pero no te aseguro nada xD
EliminarGracias... Magnífico dialogo entre los personajes.
ResponderEliminarY eso lo dice el que tiene un blog que se llama "Fron My Eyes". Cateado en inglés, titi. Antes de ser """irónico""" deberías juzgarte a ti mismo.
EliminarBesis.